Hay momento en que te preguntas dónde estás, qué haces, es esto lo que quieres... A mí me ha pasado muchas veces. Pero llevaba ya bastante tiempo centrada y a gusto con mi situación. Pero de repente surge algo que te descalabra. Puede ser un acontecimiento, una noticia o simplemente una frase o palabra. Y entonces he vuelto a preguntarme cosas. Mi situación...¿y cuál es mi situación? ¿realmente sé dónde estoy? Pues creo que no. De nuevo estoy desubicada, intentando encontrar mi sitio, pero por primera vez en mucho tiempo ello no me entristece hasta límites de la depresión. Estoy en un punto bastante neutro, sin altos ni bajos. Y me pregunto cómo es posible haber vuelto a llegar hasta aquí cuando me encontraba en un punto tan alto. Bueno, supongo que mi zona más cómoda es esta. Los cero grados. Es decir, ni frío ni calor. No estar eufórica ni estar llorando por las esquinas. Aunque he de reconocer que me gustaba lo de estar arriba. Tal vez vuelva a conseguirlo.