jueves, 30 de septiembre de 2010

Busco

Busco volar a un lugar lejano, desaparecer en un lago de aguas cristalinas, deambular por un prado verde lleno de flores rojas y amarillas. Busco flotar en el espacio, dejarme caer en el cráter de un volcán en erupción, naufragar en una isla desierta. Busco entender las mentiras, encajar los golpes, esquivar los puñales. Busco luchar contra los fantasmas, capear las tempestades, derribar las barreras. Busco, busco, busco y no logro encontrar nada...

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Reflexión

Es increible como todo puede darse la vuelta en 24 horas. Lo he experimentado varias veces en mi vida. Cuando te paras a pensarlo te das cuenta de que en un suspiro nada es como. solía ser.  La gente, los paisajes, las ideas... todo ha cambiado y nunca volverán a ser como eran. Eso puede ser bueno para unos y malo para otros. Y a veces puede ser terrible. Y te paras a pensar en cómo ha pasado y no encuentras explicación posible. Lo que empezó siendo un gran día se convierte en una gran mierda. Todo es demasiado complicado... o demasiado fácil, según se mire. Y te sientes defrudado por la vida, porque de nuevo te ha dado un revés que no te esperabas. Y no te lo merecías...

lunes, 27 de septiembre de 2010

Crónica de una quedada bloguera (os advierto que he soltado un rollo importante)

Mi fin de semana empezó saliendo del hospital un viernes a las 9 y pico de la mañana tras una guardia horrible. Llegué a casa sobre las 10. A la 1 me venían a recoger para ir al aeropuerto y aún tenía que hacer la maleta y varias cosas más así que no pude dormir nada. Ya en el aeropuerto, sentada en la terminal correspondiente, empecé a pensar en la aventura en la que me embarcaba. Iba a coger un avión para ir a Madrid a encontrarme con un grupo de personas muy heterogéneo: unos muy conocidos, otros apenas conocidos y otros desconocidos. Qué emocionante, pensé. Me moría de ganas de que llegara la noche.
Un par de cabezadas poco fructíferas en el avión, dos trasbordos en el metro de Madrid y un pequeño paseo y ya estaba en el hostal. Me reencontré primero con PerroA (supongo que Pérrez estaría en su bolsillo porque no se pierde una) y con Guti. Fue un encuentre muy agradable, pero breve porque yo necesitaba dormir un poco. Me acosté, pero no pegué ojo porque me habían dado una habitación junto a la recepción. Aún así descansé la vista y las piernas. Una ducha, unos toques de maquillaje y al encuentro de otra parte del grupo que decía estar en la Plaza de Oriente. Dios, cómo disfruto andando por Madrid. Allí me encontré de nuevo con PerroA y Guti, y además con Phant y Shigella, con los que había compartido una semana entera en Las Palmas. Una llamada de R nos llevó a la Puerta del Sol, bajo el reloj. Un punto de encuentro emblemático. Conocernos en el km. 0 iba a ser un momento muy especial.
Estuvimos esperando un buen rato y yo decidí llamar a Rayajo, que finalmente no pudo unirse a nosotros por motivos personales, aunque me consta que le hubiera encantado. Mientras hablaba con él me separé algo del grupo para oir mejor, pero estaba atenta a la llegada de R, que venía con un amigo (Toño) y con Proyecto de Escritora. Como R me había dicho que su amigo era muy alto y yo ya lo había visto a él y a PE por foto los reconocí enseguida y les hice señas. Nos saludamos, nos presentamos (con nuestros nombres reales) y, de repente, ya éramos un Grupo, así con mayúscula.
Una cena sirvió para hacernos intercambiar datos sobre nosotros, bromas, chistes y algo de política (ésta de la mano de Guti y R que descubrieron así una pasión común). Luego algo de rock en un bareto en el que compartimos espacio con Nancho Novo. Yo estaba algo desconectada. No lograba entrar en ninguna conversación porque no oía nada, así que me dediqué a pensar en lo que estaba pasando. Era fantástico como habíamos congeniado todos en tan poco tiempo. Me costaba creer que hacía unas pocas horas que nos conocíamos todos. Nos sacamos fotos de todo tipo y nos tomamos algunas copas de más. Tanto fue así que nos fuimos a un karaoke en el que no conseguimos cantar ninguna de las canciones pedidas, pero nos reímos mucho. Allí nació “la chica gin tonic”. El final de la noche fue en una disco donde la media de edad rondaba los 40 y donde un camarero entrado en años (muchos, eh) cortejó sutilmente a shigella. Mucho baile, más copas y más risas y cada uno a su cama.
El sábado fue diferente. Guti se marchó a mediodía (una pena). Yo almorcé con PerroA y luego de una siestecilla nos encontramos en la Plaza de España con R, Toño, PE, Shigella y Phant. Los madrileños nos llevaron a un par de sitios muy chulos. Esa noche descubrimos que en Madrid todo está a media hora. Nos lo enseñó R. Claro que su concepto de la media hora… La verdad es que estábamos todos muy cansados y además cenamos muy tarde. Aún así todos nos esforzamos por aprovechar el tiempo en nuestra última noche. Así fue como R prometió llevarnos a un local muy cabaretero de Chueca donde ponían música funky y demás y nos encontramos con un local tipo puticlub con un drag queen de pelo rosa sentada a la barra y otra cantando por Rocío Jurado sobre un escenario “Como yo te amo”… Shige se quería quedar, pero la mayoría quedaron espantados y tuvimos que irnos. De media hora en media hora fuimos yendo a diferentes sitios que estaban hasta arriba de gente. Al final acabamos en una cafetería que cerró con nosotros dentro jugando al “Gestionary” (con las tarjetas del Pictionary haciendo gestos), ocupando medio local y tomando mojitos asesinos. Cuando al fin nos apagaron las luces del bar nos marchamos con idea de ir a desayunar a un bar que estaba… ¡a media hora! Después de tanto caminar se hizo tan tarde que cada unos se fue a dormir.
El domingo nos reunimos en el Retiro con unos bocatas y nos despedimos de PerroA, Shigella y Phant, que volvían en coche. Yo cogía el avión más tarde así que me llevaron a tomar algo al círculo de Bellas Artes, donde nos sentamos a 3 mesas de Nacho Cano. ¡Qué sitio más pijo! Y tras eso, me marché yo también con una gran pena y con la sensación de haber pasado uno de los mejores fines de semana en mucho tiempo. 
Ya contaré lo que me pasó en el viaje de vuelta en otro momento que esto ya es demasiado largo.

Un par de detalles de cada uno:
-PerroA: nos conocemos hace mucho y me encantó encontrarme contigo de nuevo y con un mejor rollo.
-Shige: ya sabes que te quiero un montón y me divertí un montón echando unos bailes contigo.
-Phant: aguantaste como un campeón a pesar de no gustarte mucho ir de discoteca. Eres un sol.
-PE: eres una chica encantadora. Nos maravilló el gran esfuerzo que hiciste de venir los tres días a pesar de tener que coger tren y metro. Gracias de verdad.
-Toño: eres un tío genial. Me he reido un montón contigo y me ha encantado conocerte.
- Guti: eres una gran persona y aunque nos conocemos poco te tengo mucho aprecio y me apenó que no pudieras quedarte un día más.
-R: eres tal y como me imaginaba. Un tío sociable, simpático y carismático. El mejor anfitrión. Gracias por todo…

Besosssss

viernes, 24 de septiembre de 2010

L. ya se he ido...

El azar quiso que dejara este mundo el día que yo estaba de guardia. Como si estuviera predestinada a ser yo la que le hiciera el certificado de defunción. Le di el pésame a la familia y la vi. !Cómo cambia uno cuando muere! En su foto de DNI estaba guapísima. Me cayó más de una lágrima mientras escribía la hora de le muerte...

sábado, 18 de septiembre de 2010

L. ya lo sabe

Ya he contado cosas sobre mi paciente L. Tiene un cáncer en estadío cada vez más terminal y nadie quería contarle que se estaba muriendo. Pero toda su familia lo sabía ya. Yo insistía a mis adjuntos que habría que decírselo, pero todo me decían que mejor no. Sólo si lo pregunta directamente, sólo si insiste, para qué quitarle la esperanza, qué sentido tiene decírselo ahora... Esas eran las frases que me decían en respuesta a mi insistencia. Pero lo cierto es que la paciente varias veces preguntó directamente y no fueron capaces de darle una respuesto sincera. Se dedicaban a irse por las ramas. Yo creo que tenían miedo a darle la noticia. A los médicos no nos forman para dar malas noticias. Es increible, pero cierto.
Hace unos pocos días estaba ya haciendo informes clínicos en la planta y pasó por allí la médico de Cuidados Paliativos (es la unidad que se encarga de tratar globalmente a los pacientes cuando ya no hay tratamientos curativos para ellos). Hablé con ella y despotriqué a gusto. Le dije todo lo que pensaba, que la paciente debía saberlo, más ahora que tal vez era trasladada a Cuidados Paliativos. ¿No se preguntaría la paciente por qué la trasladaban a esa unidad? Ella me dijo que claro que debía saberlo, pero que debía haberlo sabido hace mucho y que quién se lo iba a decir ahora. "Yo se lo puedo decir si me das permiso. No tengo ningún problema". Y fuimos las dos con la enfermera y hablamos con ella. Fue duro. La paciente lloró, la familia lloró y yo estuve a punto de llorar. Como suponía, ella sospechaba que las cosas no iban bien. Después de eso me sentí aliviada. Estaba convencida de haber hecho lo correcto.
Al día siguiente lo comenté con mis adjuntos y a ambos les pareció fatal que se lo hubiéramos dicho. Que si para qué a estas alturas, que si le hemos quitado la esperanza que es lo único que le quedaba... Y yo me sentí fatal. Y empecé a darle vueltas a la cabeza. ¿Es posible que la única razón por la que quería decírselo era para aliviar mi propia conciencia, es decir, por puro egoismo? ¿Tal vez hubiera sido mejor que no lo supiera? ¿Realmente hubiera sido mejor para ella vivir (o en este caso, morir) en la ignorancia? No sé qué contestar.
No he vuelto a verla desde entonces. Los médicos piensan que no le queda mucho de vida y yo ahora tengo unos días libres. Es posible que no la vea más. Y me reconcome pensar que tal vez le he generado más sufrimiento aun en sus últimos días de vida.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Léxico canario (4)

1. Emboste:
sust. Atracón de comida. Por ej: "¡vaya emboste me pegué en la boda!"

2. Embostarse:
v.tr. Comer mucho, más de la cuenta. Por ej: "Pepe siempre se embosta cuando vamos a un buffet"

3. Totorota:
sust. Tonto, imbécil. Sinónimos: papafrita, tolete.

4. Piña de millo:
Mazorca de maiz. 

domingo, 12 de septiembre de 2010

Deseo



Desde en momento en que lo conocí supe que quería acostarme con él. Había algo en su manera de hablar, de expresarse, que hacía que me fuera derritiendo lentamente por dentro cada vez que lo veía. No podía explicar muy bien qué era, pero me atraía como nunca me había atraído nadie. No era amor: era otra cosa. Además era perfectamente consciente de que era un hombre casado. Por eso aquella noche cuando nos encontramos en la cena de empresa sabía que algo pasaría si permanecía mucho rato a su lado. Yo tenía la sensación de que él no sentía lo mismo por mí, pero que sabía perfectamente la impresión que me causaba y lo utilizaba. Estoy convencida de que le divertía provocarme. El azar quiso que lo sentaran justo enfrente de mí en la mesa junto a su mujer. Empezó a hablar con todos los que lo rodeaban. Era un hombre carismático. La gente lo adoraba. De vez en cuando me miraba de refilón y me guiñaba en ojo, consciente de que a mí se me erizaba la piel cada vez que se cruzaban nuestras miradas. Sentía mucho calor y la garganta seca. No era capaz de intervenir en la conversación por miedo a quedarme sin palabras de repente. Tomé varias copas de vino en un intento por aplacar mi sed y de relajarme un poco, pero eso sólo hizo que estuviera más excitada aún ante cada mirada y cada guiño. De repente sentí que un pie me rozaba la pierna. Miré a mi alrededor y todos estaban enfrascados en una aparentemente divertida conversación. Él me miró unos instantes y me guiñó el ojo. Y continuó acariciándome la pierna mientras le contaba un chiste a los presentes. Sentí que mi mente se iba lejos en el momento en que descrucé las piernas y su pie llegó a mis muslos. Cuando acabó la cena me alejé de él lo más rápido que pude, pero en un momento dado nos cruzamos. Me dijo que su mujer y él se iban a casa. Me dio dos besos mientras agarraba la mano izquierda. Noté que deslizó en ella un papel. Cuando me soltó la mano, la cerré fuerte y la puse detrás de mí hasta que se marcharon. Entonces abrí la mano y desdoblé el arrugado papel. Decía: “Estaré en la puerta del bar en 1 hora. Si quieres que cumplamos nuestras fantasías, ven”. Comencé a respirar pesadamente y sentí que el corazón se me salía del pecho. Salí del restaurante y comencé a andar por la calle rápidamente. De vez en cuando volvía a mirar el papel. Quería hacerlo, lo deseaba más que nada en el mundo. Pero mi mente me decía que no lo hiciera, que no tenía sentido, que aquello no iba a ninguna parte. No fui. Lo volví a ver en la oficina al día siguiente. Me sonrió y me guiñó el ojo como si nada hubiera ocurrido. Nunca supe si fue o no. Pero prefiero no saberlo…

sábado, 11 de septiembre de 2010

Léxico canario (3)

1. Fatiga: 
Palabra polisémica en las islas. Nunca sabes muy bien lo que significa. A veces utilizado en plural. Significados: 1. cansancio. 2. náuseas. 3. mareo. Por ej: " ¡Doctor, estaba en la calle y me dieron unas fatigas"!    (es la palabra más temida por los médicos de urgencias).

2. Baifo:
Cría de cabra.


3. Se me fue el baifo
Se me olvido. Por ej: " Iba a traerte el libro pero se me fue el baifo"

4. Papafrita:
Tonto, idiota.

jueves, 9 de septiembre de 2010

El sexo

Qué gran invento. Reconozco que al principio de mi andadura en esto del sexo no me sentía muy agusto. Y no es porque fuera muy joven, ya que yo fui de las que empezó tarde. Tenía cierta aversión al mismo, no sabría bien explicarlo. No es tampoco que no disfrutara, pero no disfrutaba lo suficiente como para tener ganas de más. Tal vez la persona no era la correcta. Sí, creo que era más bien eso porque después empecé a disfrutar de lo lindo. Y cada vez más. Dicen que el mejor momento sexual de las mujeres es en la treintena, así que estoy en mi momento álgido. 
De verdad que me cuesta mucho entender como alguna gente puede renunciar al sexo. ¿Cómo es posible resistirse a tamaño placer? Las caricias, los besos, los abrazos. La aceleración de la respiración y el pulso. El aumento de la temperatura corporal, el sudor, el contacto de dos pieles. Y, por supuesto, la complicidad que se siente con otra persona que al contacto con tu cuerpo está experimentando en el suyo unas sensaciones similares a las tuyas. E independientemente de que exista o no amor entre ambos, en ese momento, el uno para el otro es especial. Hay una inexplicable conexión en dos personas que se entregan a un acto sexual y no es posible quedar indiferente después de haber estado el uno dentro del otro...



miércoles, 8 de septiembre de 2010

Lo inesperado

¿Quién lo iba a pensar? ¿Quién me lo iba a decir? A veces suceden cosas que nunca hubieras imaginado que sucederían. Si son buenas mejor que mejor, como ha sido en este caso. Lo cierto es que como todo lo inesperado y cuasi-imposible te despiertas al día siguiente pensando si lo has soñado. Pues no lo tengo claro, la verdad...

martes, 7 de septiembre de 2010

Mejorando

Hoy me encuentro sorprendentemente bien. No sé cómo ni por qué. Las cosas van bien. Últimamente me ha dado por caminar de vuelta del trabajo. Hoy caminaba por la calle con decisión, como si la calle fuera mía. La languidez y melancolía de otros días se había esfumado. Tal vez sea cosa de un día, pero creo que no. Mi renacimiento ya está en marcha y, aunque por momentos mi ánimo se comporta como una montaña rusa, paso cada vez más tiempo en la zona más alta y el área bajo la curva es mayor. Sigo adelante.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Gravity in motion

Como he visto que os ha gustado la canción a muchos os dejo aquí este video para que veáis cómo se puede transformar una preciosa canción en movimientos alucinantes que transmitan tanto o más que la propia música. La música habla de una adicción, yo creía que a una persona, pero puede aplicarse a cualquier cosa. La coreografía representa lo mismo. Él es la adicción y ella la persona que trata en vano de librarse de ella (id directamente al minuto 1 para saltaros las imágenes del ensayo y la explicación. No se oye muy bien, pero es el que mejor imagen tiene de los que encontré).

viernes, 3 de septiembre de 2010

Gravity

Deseo compartir esta canción con vosotros estos momento en los que me siento un poco triste. No digo nada más. Sólo que la disfruteis...

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Para los que creen en el destino...

Por casualidad un criado oyó en la plaza del mercado que la muerte lo estaba buscando. Volvió a casa corriendo y dijo a su amo que debía huir a la vecina población de Samarra para que la parca no lo encontrara. 
Esa noche, después de la cena, llamaron a la puerta. Abrió el amo y encontró a la muerte, con su larga túnica y su capucha negras. La muerte preguntó por el criado.
- Está enfermo y en cama - se apresuró a mentir el amo -. Está tan enfermo que nadie debe molestarlo.
- ¡Qué raro! - comentó la muerte -. Seguramente se ha equivocado de sitio pues hoy, a medianoche, tenía una cita con él en Samarra


Leyenda de la cita en Samarra
(Del libro "El ocho" de Katherine Neville)