viernes, 22 de octubre de 2010

La suerte de una gota

He decidido rescatar un antiguo post que escribí en mi primer blog. Me gusta y quiero compartirlo con mis nuevos amigos blogueros.
 

Llueve. Caen gotas incesantemente. Gotas grandes. Gotas pequeñas. Gotas que mojan todo sobre lo que caen. Repican sobre los cristales con un ritmo constante y monótono. Tras estrellarse contra la ventana, agonizan un momento y, finalmente, se deslizan hasta morir. Y todo ésto se repite sin parar. Cada gota hace un viaje distinto y tiene una vida distinta, pero, inevitablemente, todas acaban muriendo en algún lugar: en la ventana de alguna casa, en la hierba recién cortada, en el asfalto de alguna carretera, en el paraguas de algún viandante... Algunos lugares son más agradables que otros para encontrar el inevitable fin. Pero ninguna escapa de su destino. Algunas afortunadas tienen la suerte de caer sobre el agua, la fuente de sus vidas, y acaban fusionándose para convertirse en algo superior y con una vida diferente, pero casi infinita. Curiosa suerte la de una gota. Toda la vida cayendo, pero sin saber dónde. Toda la vida pensando dónde te estrellarás. Siempre en compañía, pero solas al fin. Con una única ilusión. Morir sobre la fuente de sus vidas: el agua.

5 comentarios:

M dijo...

Muy bonito Princesa. Pero piensa que todo se transforma. Llueve, se evapora, vuelve a las nubes y vuelve a caer. y otra vez igual.
El agua es la fuente de la vida...
Es muy bueno ver correr el agua. A mi personalmente me energetiza, aunque tambien me gusta una piscine pour nager.

rombo dijo...

Bonito.. y la foto, genial !!

Guti dijo...

El día 15 de este mes era el día del agua. Este post me ha recordado a ese día.
Tenías otro blog, ¿Qué ha sido de él?

Princesa Ono dijo...

Mónica: gracias
Rombo: gracias también
Guti: Pues está ahí, no lo han eliminado. Es donde nos conocimos unos cuantos, incluido tú. Tublog.es. Recuerdas??

Guti dijo...

Sí, me acuerdo. ¡Qué tiempos aquellos!